domingo, 14 de octubre de 2012

Juliet


Dicen que morí.
  Se me paró el corazón y no respiraba; a los ojos del mundo estaba muerta de verdad. Unos dicen que me fui por tres minutos, otros que cuatro; yo empiezo a pensar que la muerte es cuestión de opinión...

  Llamándome Julieta, supongo que debería haberlo visto venir, pero quise creer que, por una vez, no tendría lugar la misma lamentable tragedia de siempre, que esta vez estaríamos juntos para siempre, Romeo y yo, y que nuestro amor no volvería verse interrumpido por sombríos siglos de confinamiento y muerte.
  Pero no se puede engañar al Bardo. Así que morí, como me correspondía, cuando acabó mi texto, y volví a caer en el pozo de la creación.

Ay, pluma dichosa. Ésta es tu página.
 Toma tinta y déjame empezar.
(Prólogo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario