Drácula parte de la existencia de Vlad Tepes, un personaje
histórico situado en la Rumania del siglo XV, y conocido por su heroicidad
contra la invasión otomana, pero también por su crueldad. A partir de esta
historia y de no pocas leyendas acerca de él, Bram Stoker escribe esta
magistral novela en forma de diarios y cartas que los personajes principales
van intercambiándose. Una obra trascendental de la literatura gótica que abrió
un nuevo camino en la novela de terror y que instauró la figura del aristócrata
transilvano como arquetipo del mal y modelo de seducción perversa, y sus
páginas han sido fuente innagotable de innumerables adaptaciones
cinematográficas. Por fin una edición a la altura de la grandeza literaria de
este clásico, profusamente ilustrada con grabados de la época. Drácula es uno
de los personajes más conocidos del terror gótico.